Si estás pensando en comprarte una segunda vivienda, ya sea para ir de vacaciones, para uso propio o para alquilarla y conseguir un dinero extra, te traemos una serie de consejos para despejarte las dudas que puedas tener antes de decidirte.

Lo primero a valorar, es la zona en la que quieres comprar la segunda residencia.

Para elegir la zona, debes tener en cuenta los intereses que buscas. Va a depender de si vas a querer una casa en la montaña, un apartamento en la playa, un piso en el centro de una gran ciudad… para eso sería conveniente que cuando lo tengas claro, te acerques a la zona de interés para conocerlo bien a fondo, para así asegurarte de tomar la decisión correcta. En el caso de las propiedades con las que contamos, tienes un amplio catálogo para decidirte, ya que abarcamos muchos de estos gustos.

Es preferible, que elijas una zona con todas las comodidades y servicios posibles, siempre será mejor que el lugar que escojas para la segunda residencia tenga a mano tiendas, restaurantes, bancos, farmacias, centro de salud cercano y lugares de ocio para toda la familia. Esto te evitará en muchas ocasiones, tener que desplazarte en coche para realizar cualquier tarea cotidiana. Por supuesto que, si vas a ponerla en alquiler, revalorizará mucho la vivienda y siempre podrás incrementar el precio, gracias a tener cerca estas comodidades.

Algo que sabemos que también hay que tener presente, es la distancia a la que se va a encontrar esa segunda residencia de donde vives habitualmente, porque no es lo mismo si la vas a querer para ir de vacaciones o para pasar los fines de semana, puentes y festivos. Si tu pretensión es visitarla frecuentemente, te conviene que sea un sitio cercano, para que no destines mucho tiempo en llegar a ella, porque, por el contrario, si hay mucha distancia, al final, te puede dar pereza desplazarte por el tiempo que le dedicarás a llegar y hará que se quede un poco abandonada. En el caso de que sea para vacaciones, ahí dará igual, puesto que tendrás más tiempo libre para llegar y disfrutar de ella.

Evidentemente, si tu idea es comprar una segunda residencia para alquilarla, la distancia, tampoco debería ser mucha, porque cada vez que surja algún imprevisto, tendrás que desplazarte para cumplir con tu obligación como propietario.

Los gastos que conlleva una segunda residencia, también es un factor determinante para saber los costes que vas a tener. En el caso de que quieras ponerla en alquiler, te servirá para establecer el precio que pedirás por ella.

Además del precio de la propia casa, por muy desocupada que la podamos tener si es para uso particular, están, los gastos de mantenimiento, como el gas, el agua, la luz, los impuestos, los gastos de comunidad, piscina o cuidado del jardín…

Así que, si estás pensando en comprar una segunda residencia, da igual el uso a la que la destines, siempre puedes venir a cualquier oficina que tenemos, para gestionarte todo lo relacionado con la compra, para que no tengas que preocuparte por nada, solamente de disfrutar de ella u obtener un beneficio económico. No dudes en visitarnos.